miércoles, mayo 17, 2006

UNA EXPERIENCIA NIHILISTA - JACOBI

¿Sentido de la vida sin religión o nihilismo?

"Fue una visión que nada tenía que ver con idea religiosa alguna, de una duración sin fin; tenía la edad dicha, y el objeto de mi reflexión era la eternidad a parte ante. Esta visión me asaltó inopinadamente con tal claridad y me sobrecogió con tal violencia que me sobresalté, dando un grito primero, para después caer desvanecido. Cuando volví en mí, me sentí naturalmente inclinado a renovar esta representación; el resultado de ello fue un estado de inexpresable desesperación. El pensamiento de la anulación, que había sido siempre horrible para mí, se hizo todavía más atroz; y tampoco podía soportar la perspectiva de una duración eterna"[1].

La filosofía clásica tiene una actitud contemplativa ante el nous infinito, relacionado con toda la realidad. Sería la versión cristiana del Logos divino por medio del cuál todo fue hecho (San Juan). Goethe, en su Fausto, lo transforma en mente, fuerza y finalmente en acción. Para los modernos no hay un sustrato, el principio último es la autoactividad. Así, en Descartes es la res cogitans, sin facultades substantes. En la filosofía clásica la actitud es de admiración, en la moderna es de estremecimiento y de duda. Sin realidad extramental, el sujeto pone las categorías mediante un juicio de la voluntad. El yo kantiano no contempla la realidad, la impone. La lógica trascendental es vista como metafísica para Fichte y Hegel. Esta es la tradición en la que bebe Jacobi y contra la que intenta sobreponerse.




[1] Jacobi, F.H., J.G. Hammans Briefwwchsel mit F. H. Jacobi, 67-68; Cit. en Cruz Cruz, Juan, Razones del corazón, Eunsa, Pamplona 1993, 13.

# 1 GSV - El sentido de la vida - Categoría: General